Phubbing es el acto de ignorar al otro en un contexto social, mientras se presta atención al teléfono.
Como cada año, para el 20 de julio, los festejos por el Día del Amigo, los creativos de las empresas tienen un desafío para ser originales y diferenciarse. Desde Cerveza Salta pensaron en el uso del celular en las reuniones y decidieron abordarlo de una manera muy original: Crearon el primer Frigooffline para que los grupos de amigos puedan “frizar” sus celulares y disfruten sin distracción de la “Semana del Amigo Offline”.
La intención de la cervecera es hacer reflexionar sobre las consecuencias negativas que este fenómeno social provoca en las relaciones humanas. Y en línea con su tradicional slogan “El sentir que nos une”, Cerveza Salta promueve el encuentro, el diálogo y la conexión real con los amigos en un video muy divertido.
Mirá el video y te vas a quedar sin ganas de usar tu celular cuando estés con amigos. Y esto aplica no sólo para esa fecha tan especial, ya que estaría muy bueno que el mensaje esté presente en cada ocasión importante, en toda reunión con seres queridos, fomentando la charla mirándose a los ojos, disfrutando el momento a pleno.
Mirá el video:
Origen del Phubbing
El australiano Alex Haigh con sólo 23 años, decidió iniciar un movimiento anti-phubbing, lo que le ha valido titulares en diversos diarios del mundo. A través de www.stopphubbing.com y la página de Facebook Stop Phubbing, Alex busca crear conciencia entre los “phubbers” de lo desagradable que puede ser su obsesión, además de motivar a los “anti-phubbing” a actuar, con cifras como que el 97% de las personas víctimas de “phubbing” encuentran que su comida tiene peor sabor, o que el 87% de los jóvenes prefiere textearse que hablar cara a cara.
A través del uso del acrónimo (una clase de sigla cuya pronunciación se realiza del mismo modo que una palabra) de las palabras en inglés teléfono (phone) y snubbing (menospreciar), se busca frenar el muy frecuente uso de los celulares en una cita o encuentro. Desde su web, Haigh explica que la idea no es crear una guerra contra la tecnología, sino el sentarse a evaluar la forma en que nos comportamos frente al otro cuando tenemos un celular.


