Sí, fue una fiesta, un festival, pero la cerveza parecía ser una invitada, a lo sumo, de honor. Y el dato no es menor si se tiene en cuenta que el Baires Beer Festival nació como una de los eventos más importantes de Latinoamérica referidos u orientados a venerar a la diosa cerveza. Sin embargo, la cuarta edición (1°, 2, 3 y 4 de marzo) perdió mucho del terreno ganado en los años anteriores.
Es indudable que el trabajo de organización, la preocupación por cubrir cada uno de los requisitos exigidos para ese tipo de fiestas luego de la tragedia de Cromañón y la búsqueda de diversidad en cuanto a atractivos han sido loables.
Es imposible poner en duda el trabajo de quienes tuvieron la iniciativa de brindar un festival regado de cerveza en la Ciudad de Buenos Aires. Y siempre es bueno aplaudir el emprendimiento, la apuesta. Pero hay muchas cosas que «hicieron ruido».
Entre los puntos más flojos de la propuesta está la poca atención o cuidado que se le brinda precisamente a quienes dan sentido al Beer: los cerveceros artesanales. El reflejo de esto pueden ser las ausencias de Buller y Stone, entre otras cerveceras. Además, aunque suene a hilar muy fino, casi todo lo diseñado conspira contra el disfrute de la cerveza: lugares oscuros, humo artificial, ruido-música constante.
En la edición que terminó el domingo 4 de marzo las propuestas de cervezas fueron: Isenbeck, Warsteiner, Grolsch, Leffe, Staropramen, Antares, barbaroja, Neffer, Baires, Cassaro y la Asociación de Cerveceros Artesanales de la República Argentina, quien presentó, entre otras variedades, cervezas filtradas con tierra de diatomea (esqueletos de diminutas plantas acuáticas -fósiles- que vivieron y se multiplicaron en aguas prehistóricas).
Sobre llovido, mojado
Si bien los expositores no se mostraron demasiado de acuerdo con el lugar elegido para el Baires Beer Festival (se desarrolló en Huergo 131, en Las Cañitas) por el estado de los pisos, las paredes, la ubicación, la capacidad, etc., el tiempo no ayudó demasiado y el municipio tampoco.
El día de la inauguración debió postergarse por un alerta meteorológico luego del temporal de agua y viento que azotó a Capital Federal, Gran Buenos Aires y parte del resto del país. Jueves 1° de marzo suspendido. Resultado: un día menos para recuperar inversión, reprogramación de shows, devolución o cambios de entradas y todos los demás trastornos imaginables.
Pero eso no fue todo, ya que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires hizo su»aporte» a la «calentura» de quienes apostaron tiempo, dinero y expectativas para estar presentes con sus productos. Una disposición municipal indicaba que no se podía vender cerveza en la fiesta de la cerveza hasta que no termine el primer show, originalmente pautado para que finalice alrededor de las 21.40 hs.
A lo insólito de la medida, aplicada a rajatabla, se sumó un retraso de la
presentación de Dancing Mood de aproximadamente una hora.
Conclusión: Caras largas de cerveceros, cara de o… de quienes fueron a tomar, beber, chupar o degustar, largas colas impacientes implorando que se levante la «veda», gente comiendo y tomando ¡gaseosas! a la fuerza para no atragantarse con alguna hamburguesa, pizza, fatay o shawarma.
El lugar
El predio elegido tiene onda para transformarlo en boliche, es ideal para
eventos fashion, pero quizás no sea el más adecuado para una fiesta
pretendidamente cervecera.
Por la disposición de los lugares (un ala central y dos a ambos lados con
divisiones en box de tamaños disímiles), se distribuyeron por sectores tanto las opciones de cervezas como las musicales. Al final del pasillo se dispuso una pista de arena con un escenario para la presentación de los grupos musicales que se presentarían en cada jornada: La Mancha de Rolando, Vilma Palma, Los Cafres, entre otros. Para animar la noche también se sumaron shows musicales en vivo, DJ’s y performances artísticas de todo tipo.
En definitiva, lo que queda en claro es que cada año el Baires se parece más a un boliche enorme con opciones musicales y la presencia mayoritaria de cerveza, sin demasiadas opciones.
hola soy jose piriz director y cantante del grupo sertanejo los aventureros soy de posadas misioens quisiera promocionar para poder estar en alguno de los eventos en el pais ya que queremos que se conozca el baile sertanejo en el pais desde ya espero su respuesta al 03752-15329391 gracias
en caso de solicitarlo tengo un disco grabado de nombre todo por un sueño