Los maestros cerveceros de Lieja han preparado una cerveza “ruso-belga” para festejar el centenario de la Primera Guerra Mundial de los años 1914 al 1918, la cual, ellos esperan que la pruebe el presidente ruso.
Según uno de los promotores del proyecto, la cerveza se ha fabricado en memoria “de los belgas que, a bordo de los blindados Minerva, fueron enviados a apoyar al zar (Nicolás II)”.
La cerveza “ruso-belga” es una bebida espumosa clara con nueve grados de alcohol, vertida en una botella de medio litro de uso tradicional en Bélgica. Se espera que la nueva cerveza comience a ser comercializada dentro de mes y medio.